lunes, 13 de diciembre de 2010

Aprendiendo...

No manejaba muy bien el asunto del estrés, a pesar de que había comprobado los estragos que este causa...depresión, insomnio, falta de apetito incluso he llegado al punto de tener brazos y piernas temblando sin poder controlarlas y es que llegué a tomar calmantes para poder conciliar el sueño, sin mencionar que perdía peso muy rapidamente y me veía muy demacrada.

En mi actual empleo, estoy cursando una época de mucha tensión, al inicio esto me provocaba desesperación, angustia y casi siempre me irritaba facilmente, me di cuenta que iba a repetir aquella horrible situación en la que llegué a estar en un estado de salud deplorable.

Pero reaccioné y poco a poco entendí que agobiandome las cosas empeoraban y solo conseguía hacer cosas torpes. Empecé a tomar las cosas con calma, no importaba que sean muchas y que sintiera que no me iba a alcanzar el tiempo, sólo las aceptaba y no pensaba en cómo las iba a hacer. Al final del día laboral me daba cuenta de que habia trabajado eficientemente y no terminaba tan cansada como antes.

Resulta que el estrés te mata poco a poco, porque envejeces muy aceleradamente ya que te va deteriorando tus arterias, tus neuronas mueren más rápido de lo normal y tu salud ya no es la de una persona joven.

Afortunadamente siempre existe la oportunidad de cambiar de actitud y no permitir que el estres se apodere de tu cuerpo, esto muchas veces se consigue canalizando el estres hacia actividades que nos provoquen sensaciones de relajamiento y distracción.

Inténtalo!

Slds.


Betsy

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